¿Cómo actuar ante las rabietas?
Si no sabes como reaccionar y pierdes la calma cuando tu hijo/a tiene rabietas, aquí te dejamos unos consejos que te pueden servir:
Anticiparnos a la rabieta: La falta de sueño o el no querer echar siesta aumenta la aparición de rabietas.
Mantener la calma: No hay que alterarse ante esta situación, ya que eso puede provocar el efecto contrario al que queremos conseguir.
Ignorar: Dentro de lo posible, no debemos darle importancia a la situación, ya que muchas veces cuando ocurre esto es para llamar la atención y si el niño/a percibe que no lo consigue, dejará de hacerlo.
No ceder: Si el niño/a quiere hacer algo o conseguir algo, no debemos dárselo. Tiene que entender claramente que una rabieta no sirve para conseguir nada.
Importancia: Aunque las rabietas nos puedan poner nerviosos, a los niños/as les servirá para aprender a controlar sus frustraciones y para enriquecer su capacidad de expresión.
Dialogar: Cuando haya pasado el momento de la rabieta, hay que explicarle al niño/a porque tomaste esa decisión, que hizo mal y porque no debe hacerlo.
La rabieta se convierte en un problema y hay que consultarlo cuando:
Se producen autolesiones, lesiones a terceros o rompen objetos del entorno.
Contiene demasiado la respiración, llegando a desmayarse.
Le acompañan pesadillas, dolores de cabeza, dolores estomacales, ansiedad...
No hay comentarios:
Publicar un comentario